Hoy has tenido un dia de bella durmiente, te han hecho la resonancia craneal y de tus hemangiomas, a ver que nos dicen...
Querida África, hoy podria hablarte de muchas cosas, pero hoy te voy a hablar de las casualidades de la vida, como todos y cada uno de los seres humanos de este planeta estamos unidos por un filo hilo.
Era diciembre, estabamos una vez mas en el 12 de octubre, no parabas de correr de aqui para alla, te ibas con las enfermeras en cuanto me daba la vuelta. Entre paseo y paseo descubristes una puerta abierta, en ella había un nene un poco mayor que tu que te saluda cada vez q pasabas por delante, tu decias hola y marchabas corriendo. Mas tarde volvias, le dicias hola y te marchabas... Estas anecdotas eran muy comunes en ti por lo que apenas recuerdo la cara de ese niño ni lo que le pasaba...
Hace unas semanas estabamos en la uci, tu muy dormida, tendida en la cama. Entre los ratos que dormitabas yo no podia dejar de mirar al niño que teniamos en frente, uno de los niños mas simpaticos que he conocido, el fan numero uno de spiderman. Un niño superinteligente y despierto, un niño como eras tu...
Hace 6 meses ese niño no se me grabo en la retina, sin embargo a ti... Tu siempre has detectado a las personas especiales.
Es duro recordar que hace 6 meses los dos estabais en un hospital luchando contra la adversidad con una sonrisa, es duro ver que ahora estais los dos, en un hospital distinto agarrandos a la vida.
Africa papa dice que tu recuerdo vive en muchas personas, personas que recuerdan a una niña traviesa supercariñosa e imparable. África sigue sembrando recuerdos, sigue enseñando al mundo que la vida merece la pena. Ojala me hubiese acordado antes de Pablo, ojala hubiese recordado su cara, la vida me ha hecho fijarme ahora mas en los niños para recordarte, ojala no hubiera hecho falta tanto dolor para recordar a pequeños heroes como Pablo.
Gracias por esta leccion, prometo ur mas atenta por la vida y no olvidar, no olvidar a Alex, a Nora, a Afrika, a Andrea, a Noreli, a Brais, a Paula, a Ruben... Prometo no olvidar a estos ángeles que cada día me recuerdan lo hermosa que es la vida.
En especial, prometo no olvidar a Mara y a Tatiana, que pese a que ya no estam entre nosotros, me demostraron que jamas hay que rendirse.
Te quiero princesa, gracias por esta vida, gracias por abrirme los ojos a un nuevo mundo, a un mundo de dolor, pero tambien de alegrias inmensas e increibles. Milagros hay pocos, pero estallan con tanta fuerza que todo cobra sentido.
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